A cambio de una moneda [ Capitulo 6 ]

- Capitulo 6 -

Fiesta, copas con champagne, música en vivo todo esto lo ha vivido Junsu pero desde la parte de ser él quien lleva las copas no ser a quien le ofrecen la bebida. Esta noche Changmin ha tenido un evento de gran importancia y Junsu como buen falso novio debe acompañarlo, los padres del más alto ya han conocido a Junsu sabe que no fue de su agrado pero como le dijo Changmin que no les hiciera caso pues al final nunca nadie agrada a sus padres excepto  si tienen una buena y suficiente cantidad de dinero en el banco.

Han disimulado muy bien, todos se tragan la historia y miran envidiosos a la pareja por una parte envidian al adinerado Shim Changmin su tez morena, su perfil masculino y todo lo que exuda de macho por otra parte y aunque Junsu no posea grandes riquezas es envidiado por su belleza su piel blanca y esa mirada inocente que incita a las fantasías mas pervertidas para corromper la inocencia del hombre pero lo que más admiran es su trasero bien formado, desean pasar sus manos por la voluptuosa anatomía y anclarse a su esbelta cintura. Sin duda una pareja reúne todo, belleza, poder y dinero.

-Tus amigos no son para nada discretos, en las dos ocasiones que me has dejado solo ya me han propuesto que te abandone y que me vaya con alguno de ellos -  dice un tanto molesto pero con una sonrisilla traviesa – dice que su amiguito es más grande y que funciona mejor que el tuyo – suelta una leve risa al ver la cara del otro que fulmina con la mirada a sus “amigos”.

-Esas son solo palabras con algo de envidia en ellas, no necesito alardear de mi anatomía para llevar a alguien a la cama – dijo serio observando la entrada del salón sin duda no esperaba ver a su hyung el día de hoy – espera aquí – ordeno a su novio y salió en busca de aquella persona.

Junsu vio ir a Changmin hasta ahora la velada iba más o menos, había dejado  a su hermano en casa pues la fiesta comenzaría por la noche el único inconveniente fue el traje de gala que debía usar pero que Changmin le consiguió en una parpadeo, en algo era bueno el tener mucho dinero. Ya su falso novio se había tardado en regresar y Junsu ya había despedido a otro supuesto amigo, este si que fue la cereza del pastel del grupo pues le propueso lo mismo que los demás, dejar a Changmin, irse con él al primer hotel que encontraran además le ofreció mantenerlo y llevarlo de viaje cada que surgiera un negocio que requería de días de estancia pero lo que le molesto fue que le haya propuesto un trió no con uno de los amigos sino con su propia esposa, pues su mujer hacia todo lo que le ordenaba y con un solo “ no , gracias. Changmin me da todo eso y tiene más dinero que tú”  el tipo se alejo molesto no sin antes soltar un “puta” hacia Junsu quien lo ignoro, odiaba a los infieles y el tipo era uno a lo grande  si por él fuera le daría una patada en las bolas pero había que ser educado y dar buena apariencia ante toda la bola de ricos.

-Ha pasado algo de tiempo, Junsu – le dijo una voz familiar a su espalda – no esperaba verte en un ambiente como este.

Junsu inmediatamente se dio la vuelta, reconociendo al momento a su amigo. Jaejoong no había cambiado en absoluto excepto por el color de cabello que lo traía  de color castaño a su habitual negro,  su semblante era distinto no de aquel Jaejoong apagado y que parecía cargar el mundo a su espalda ahora lucia en paz consigo mismo, alegre, alguien que parecía muerto en vida en el pasado y ahora vivía  la vida y disfrutaba de ella. Abrazo a su amigo conteniendo las lagrimas por verlo años mas tarde y es que cada uno salió de aquel lugar en diferentes fechas y no hubo oportunidad de despedirse o intercambiar números. Se abrazaron por un largo rato  descargando todas las emociones que les invadían por su reencuentro.

-¿Qué haces aquí, Junsu? ¿Todavía trabajas en… eso? – pregunto Jaejoong con curiosidad pero que por la mirada que el otro le daba sabía que había hecho la pregunta equivocada.

- Gracias por pensar también de mí – dijo molesto – no necesito ser un prostituto para asistir a este tipo de fiestas, estoy aquí con mi novio – miro molesto a su huyng y se marcho dejando al otro con la palabra en la boca, le dolía que su amigo pensara así acaso el trabajaba ahora como acompañante que por eso la pregunta, aun si ese era el caso dolía como el infierno que en lugar de recibir palabras de confort te hagan ese tipo de preguntas.

Escucho a Changmin llamarlo y se dirigió a su encuentro no sin antes pedirle al mesero una copa. Llego con su novio y con él se encontraba un hombre casi de la misma edad que Changmin, ambos platicaban animadamente y era la primera vez que veía a Changmin tan cómodo con otra persona.

-Junsu, quiero que conozcas a Yunho – algo dentro de Junsu se agito, su rostro le parecía familiar.

-Mucho gusto. Kim Junsu – saludo con una sonrisa y un guiño que hizo sonrojar al huyng de Changmin.

-Jung Yunho y la persona detrás  de ti es mi pareja – Junsu se dio media vuelta con la mención del otro y al único que encontró fue a Jaejoong – Jaejoong este es Junsu el novio de Changmin. Junsu este es mi Jae. – presento con tal dulzura a su novio que Junsu tuvo algo de celos y sorprendido por la noticia.

-Ya nos conocíamos Yunho – declaro el castaño – Junsu es un gran amigo del cual perdí contacto.

-no es que hayamos perdido contacto hyung – comento Junsu un poco resentido –  lo que pasa es que tomamos caminos diferentes….oh lo lamento, mucho gusto en conocerte Yunho – dijo Junsu haciendo una leve inclinación con la cabeza.

-Junsu, perdona la indiscreción pero ¿no nos hemos visto antes? – pregunto Yunho con curiosidad y es que  los recuerdos  comienzan a flotar en su cabeza, sabe que se conocen pero no quiere atar cabos y que al final de cuentas este confundiéndolo con otra persona.

-Mmmm… no lo sé, quizás hayamos coincidido en alguna parte – contesta con nerviosismo orando porque no le reconozca como el prostituto que fue pero ninguno recuerda que han compartido una noche de sexo y es mejor para ambos porque solo fue sexo por dinero y nada más - ¿y como conociste a Jaejoong? – cambia de tema Junsu para no continuar con la conversación.

-Pues él fue mi cliente – dice de tajo Jaejoong dejando con la boca abierta a Junsu – Changmin conoce mi historia con Yunho quizás el pueda contártela en un lugar privado porque aquí vuelan los cuervos esperando por cualquier migaja que puedan recoger y  con la cual armar rumores sin sentido.

-Vaya, que directo hyung. Imagine que te avergonzarías de tu pasado Jaejoong – y si que se encontraba sorprendido por la declaración del mayor una parte de él se preguntaba cuan fuerte es la relación de Yunho con Jae, pero no había que ser un ciego para darse cuenta de la profundidad de las cosas sí Yunho se llevo con él al castaño desde el momento en que Jaejoong dio un paso fuera del prostíbulo es que todo esta va en serio  y algo que nunca había sentido emerge y es una inmensa envidia por que su hyung ha tenido el final feliz que Junsu hubiera querido para sí mismo pero así son las cosas y la vida que nunca salen como las planeas.

- contigo no hay por qué avergonzarse Junsu tú conoces mi vida pasada  tanto como ellos así que no hay problema de hablar libremente entre nosotros – comento el castaño mientras arrastra a su pareja a la pista de baile y es que a decir verdad a Jaejoong le encanta molestar a los homofobos de clase alta y a toda aquella lagartona que quiere poner sus manos sobre su propiedad.

Changmin y Junsu siguieron su ejemplo entrando a la pista de baile mientras la música en vivo suena cada uno está inmerso en sus pensamientos. Changmin vio a su huyng y pareció que regresaba a aquel día cuando llevo a minho a conocer  a su hyung ambos se llevaron muy bien desde el principio e incluso Minho confabulo con Yunho para su fiesta sorpresa de cumpleaños y aunque a Changmin ese tipo de cosas le molesta. En esta ocasión los sentimientos de felicidad, amor y hermandad le embargaron pues nunca tuvo tal demostración de afecto pues sus padres solo le festejaban cuando había un motivo en especial ya sea tener una nueva concesión o agradar a nuevos inversionistas y para demostrar que la familia es primero utilizaban a su hijo como cebo para aumentar su fortuna.

Por otro lado Junsu vuelve al momento en que bailo una pieza por primera vez con Yoochun, no fue en un sitio tan elegante como este o en algún centro nocturno, su primer baile fue  dentro de las cuatro paredes de su habitación, esa noche que Yoochun lo visito iba vestido con un traje frac, demasiado elegante, apuesto y tan alto para Junsu que comparado con la vestimenta de su guardarropa era el solo una persona común y corriente. Pero a Yoochun no le importo que ropa usara o si tan solo vestía una bata pues esperaba a su último cliente que no llego y en su lugar Yoochun le visitaba. El pelinegro saco su teléfono y busco por internet una pieza lenta cuando la encontró y poco a poco la música sonada por la habitación atrajo a Junsu a sus brazos, posiciono una mano en su cintura y con la otra sostuvo su mano en alto dando pequeño paso de lado a lado. Algo tan mágico que le hizo soñar aun más alto de lo que debía y Yoochun era como el helio dentro de un globo ya que mientras más palabras le susurraba este flotaba más y más queriendo tocar el cielo. En un punto de la canción sus miradas se cruzaron y sus labios se tocaron por fin en un beso compartido lleno de dulzura y amor que fue convirtiéndose en  pasión, ardiente pasión y necesidad de fundirse en el cuerpo del otro. Sentir cada palmo de piel, ese sabor salado de la piel y la impecable necesidad de amarse y prometerse que un día, algún día por fin estarían juntos sin ocultarse o mejor dicho sin pagar al de recepción para poder verlo. Esa noche hicieron el amor una vez más como llevaban haciéndolo por meses sin embargo Junsu nunca fue advertido que a quien amaba tanto ya no lo sostendría ni  tampoco habría mas susurros y palabras de amor  solo el recuerdo de alguien llamado Yoochun enterrado en lo más profundo de su corazón.

Y una lagrima rodó por su mejilla la cual fue secada por la mano de Changmin a quien solo le pudo sonreír tristemente pues los recuerdos están a flor de piel, no quiere a Yoochun en su mente mucho menos en su corazón pero es imposible olvidar a quien te dio tanto y a la misma vez te lo arrebato.

-¿podemos irnos, Changmin? No me siento bien –  esa la verdad, su corazón duele y si no se marcha es probable que rompa en llanto.

-claro, además ya es bastante tarde y mañana hay cosas que debo hacer – comenta con naturalidad, no haciendo preguntas porque sabe que Junsu al igual que él, aun tienen sus heridas abiertas.

Se despiden de los mayores notando una mirada de picardía en sus ojos, conociéndolos es seguro que también pronto se marchen para una noche de sexo ardiente. Ya rumbo a casa de Junsu, es Changmin quien le cuenta el cómo su hyung y Jaejoong se conocieron. Le explica que Yunho iba en busca de otro prostituto pero al no estar disponible eligió al otro y que una cosa llevo a la otra y cuando por fin Jae fue libre. Yunho como cavernícola lo arrastro a su casa, a su vida pues lo amaba y Jaejoong también sentía lo mismo. También le comento que a quien buscaba fue  a la persona con la que tuvo sexo por primera vez con un hombre ya que descubrió a su mujer con otro hombre. Y como tantos solo quería olvidar no con alcohol pero si con sexo

-¡Yo fui ese hombre! – Dice Junsu sonrojado pues le recuerda. Claro y perfecto en sus pensamientos un Yunho agazapado le pide sexo solo para sentirse amado - ¡por dios! ¿Qué cuando él se acuerde de mi?- pregunta histérico.

 - no pasara nada, lo que fue en su año no hace daño. Además Jaejoong lo comprendería ambos trabajaban ahí y quizás….Yunho ni siquiera llegue a recordar o siquiera a mencionarlo. No  sé con certeza que pasar Junsu – lo dice tan tranquilo que Junsu no duda en preguntarse si Changmin es humano o un ser de otro mundo- cambiando de tema, es verdad que mañana tengo cosas importantes – habla con aburrimiento – tengo que prepárame para un viaje a  Japón así que es posible que pasado mañana salga de viaje y regrese dentro de quince o veinte días.

Junsu asiente con la cabeza y respira con tranquilidad pues podrá trabajar sin tener que ponerse nervioso ante las llamadas de su falso novio o el salir a compromisos con él para hacer más realista su relación y mejor aun podría pasar un poco de tiempo de calidad con su pequeño hermano.

-te deposite algo de dinero para que te compres mejores ropas y algo a tu hermano – sorprende a Junsu con la noticia – pasa un día con tu hermano y gasten en lo que quieran. Y no, no lo voy a aceptar de regreso el dinero. – Estaciono el auto a la puerta del edificio de Junsu – anda a dormir y yo te llamo cuando regrese a Corea – se despide de Junsu con una media sonrisa.

Junsu baja del auto y ve partir a su falso novio, esta noche sí que le ha sorprendido  pero le agradece desde lo más profundo de su corazón. Su hermano será feliz con la noticia y sin más entra al edificio creando en su cabeza un plan de actividades que hará para su día con Junho.

En el aeropuerto un hombre pelinegro al lado de otro  hombre unos años más joven que él pelinegro, uno de ellos luciendo  una argolla de compromiso.

-¿Era necesario tomar un vuelo en el que llegaríamos a tales horas de la madrugada, Yoochun? – pregunta el acompañante de Yoochun con algo de molestia mesclado con sueño.

-si, Minho – responde secamente pues el otro no ha parado de quejarse desde el vuelo – mis padres quieren hablar sobre la compañía además de que quiero pasar unos días tranquilos sin tantas fiestas de por medio.

-No lo puedo creer el gran Park Yoochun cansado de las fiestas – se mofa Minho – por cierto ¿ el  no se molestara porque no lo trajiste contigo a Corea? Digo se supone que serian vacaciones de pareja y en su lugar me traes a mí.

-Se molesto al principio después le comente que pasaría la mayor parte con mi padre o en reuniones con sus amigos y eso basto para que declinara de venir.- el pelinegro no le conto a su amigo que tuvo que depositarle una grandiosa cantidad de dinero para sus gastos.

-Tengo una duda, hyung ¿solo vienes para ver a tus padres o es que algo mas te a traído? – pregunta con inocencia.

-eso mismo te pregunto a ti, Minho. A ti por más que tus padres te rueguen no los visitas y ahora de la nada a la primera aceptaste mi invitación.

Ninguno de los dos dijo nada, es mejor callar sobre sus verdaderas razones.

-¿Cuánto tiempo planeas que nos quedemos en Corea? – formula, ya un auto los está esperando a las salida del aeropuerto.

-Mmmm…. Quizás una semana o menos. – contesto Yoochun admirando la ciudad que había dejado hace ya dos años.- ¿tú que harás Minho? ¿Lo buscaras?

-No lo sé – respondió con sinceridad – me fui sin decirle nada y yo ya hice mi vida al igual que el.

Llegaron al hotel donde sus reservaciones estaban hechas, cada uno fue directo a su habitación y se dejaron llevar por sus memorias, recuerdos donde en una etapa sintieron las tan conocidas mariposas en el estomago sin embargo  por uno u otro motivo apostaron por dejar el amor a un lado.

La alarma sonó de golpe y Junsu despertó de sobresalto había olvidado que su descanso lo cambio con otro mesero porque sería su boda. Preparo su desayuno con calma pues tenia tiempo de sobra ya que olvido que su hermano no se encontraba en casa y eso le permitió algo de tranquilidad y paz mientras toma sus sagrados alimentos. Como aun tenía tiempo lavo la ropa de ambos y se dispuso a buscar entre sus cosas algo que perteneciera a Yoochun y lo encontró. Un pedazo de fotografía que no era mas que la cabeza de su ex amante pues todo lo rompió y lanzo a la basura después se arrepintió pero ya era demasiado tarde y lo único que encontró fue ese pedacito de papel. Sonrió con melaconlia, la foto se la tomaron acostados en la cama después de tener sexo y Yoochun había sacado su teléfono y pedirle que posara para un par de fotos a lo cual Junsu avergonzado acepto y la ultima había sido juntos. Ahí recostados Junsu abrazado a la cintura del otro mientras Yoochun rodeaba con su brazo la espalda del menor ambos sonriendo.

-No sé porque hago esto -  regreso el pedazo de papel a su lugar y guardo todo de prisa como si fuera fuego y sus manos se estuviesen quemando – eres un masoquista Junsu, este hombre es tu pasado y solo estas metido en esto por el dinero – se intenta convencer, repitiendo varias veces que es solo por el dinero.

En su trabajo todo marcha casual, hombres y mujeres entran al restaurante para pasar un rato agradable o para cerrar contratos o tal vez  primeras citas. Como la mesa 5 donde unos tímidos jóvenes se reúnen por primera vez pues sus padres han concertado la cita para ambos con el fin de que llegue al matrimonio y aunque es su primera vez en conocerse tal parece que están destinados el uno para el otro pues sus corazones laten acelerados y sus ojos tienen ese brillo que indica flechazo a primera vista como él cuando conoció a Yoochun, se sacude la cabeza no es momento de ponerse melancólicos así que prosigue con su trabajo. Un compañero le pide vigilar su mesa  ya que el jefe quiere hablarle con él sobre sus vacaciones y Junsu acepta pues el hombre le ha ayudado cuando necesita algún favor.

Toma los platos destinados a la mesa donde solo hay un chico en ella cuando la orden es para dos, pero no le da importancia, le sonríe a su comensal y comienza a colocar  los platos en sus respectivos lugares.

-Oh hyung esto se ve muy bien – comenta el chico con una inmensa sonrisa.

-Este es uno de los mejores restaurantes que he conocido por eso te traje – y esa voz lo congela, sus palpitaciones aumentan y sus manos sudan.

-Eres tan esplendido, Yoochun – y que mencionaran su nombre lo paraliza, lentamente da la vuelta y se encuentra cara a cara con él. Con su amor del pasado.

-Que… disfruten… su comida-  hace una venia y deja la mesa a toda prisa. Solo le grita al jefe de mesero que necesita ir al baño y corre hacia el lugar. Las lagrimas se acumulan en sus ojos, no quiere y no debe llorar pero es imposible para que caigan mas cuando los recuerdos que vivió con el vuelven en un santiamén. Saca el teléfono que le regalo Changmin y marca su número.

Tarda un par de tonos en contestarle pero al final le contesta.

-¡Changmin! ¡Yoochun está aquí! – Le grita al otro a través del aparato – ¡lo vi! – comienza a ver puntos blancos y sabe que está a punto de desmayarse si no controla su histeria.

-cálmate Junsu, respira profundamente – ordena Changmin ya que  por cómo suena Junsu es seguro que este al borde de un ataque además no esperaba a su amigo tan pronto pero que se le puede hacer sino seguir adelante con el plan aunque tenga que dejar a su falso novio solo por  varios días – Junsu no puedo estar en estos momentos contigo así que si Yoochun no te reconoció todo va bien pide a alguien más que atienda la mesa y evita acercárteles o mejor aun  dile a tu jefe que no te estás sintiendo bien – le aconseja mira su mano temblar y la verdad es que le ha afectado saber que ya está aquí – dime ¿viene solo? – pregunto conociendo mas o menos la respuesta.

-No, esta con otro hombre – responde ya un poco mejor.

-Ok – solo atina a decir aun se pregunta si es Minho quien se encuentra con su amigo o es otra persona- Junsu debo dejarte tengo una reunión en este momento.

-Mmmm…está bien –dice vacilante – Changmin ¿puedo llamarte después?

-Si Junsu, te llamare todos los días y tu puedes hacerlo cada que quieras solo si no te llego a contestar es por trabajo – suspira con pesadez por dejar a Junsu a estas alturas de las circunstancia pero no puede dejar el trabajo a un lado- nos vemos Junsu, no dudes en llamarme – se despide con un sabor triste en la boca y es que en parte le afecta que Junsu sufra por su amigo.

Junsu guarda su teléfono y sale del baño no sin antes refrescarse el rostro también tratando de borrar las lágrimas y aunque sus ojos estén hinchados no tiene remedio más que seguir con su trabajo. Suspira de alivio cuando ve a su compañero atendiendo la mesa de Yoochun y agradece que en todo el tiempo que estuvo su antiguo amor en el lugar le asignaron atender mesas del lado contrario y así no se lo encontró en ningún momento durante las casi dos horas que se mantuvieron en el restaurante.

-Junsu puedes irte a casa – le dijo su jefe al notar a su empleado nervioso y distraído, prefiere mandarlo a casa que termine cometiendo un accidente. Junsu trata de alegar que está bien pero su jefe no le cree y no le permite volver al salón, sin más remedio  va a cambiar su vestimenta y ya con su ropa normal y fuera de su trabajo emprende la marcha a tomar el autobús que lo lleve a su hogar.

Solo da unos cuantos pasos cuando lo ve ahí de frente recargado en su auto solo sin su acompañante y sonriéndole como si nada hubiera pasado.

-vaya forma de encontrarnos, Junsu.

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