Titulo: Love in the mountain
Autor: Tamys de kim
Parejas: YooSu
Género: slash, lemon
Extensión: Oneshot
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Se encontraban
en la terraza de una cafetería
localizada al sur de Chamonix, Francia. Les habían dado un descanso de una
hora, el nuevo Cf que estaban grabando iba de maravilla por los que ese mismo
día terminarían de grabarlo y comenzar al día siguiente la sesión de fotos, el
viaje había sido demasiado largo para sus cuerpos cansados y exhaustos que
pedían a gritos una cama y ahora que habían recuperado las fuerzas
perdidas tomaban de su caliente chocolate admirando el paisaje.
Puesto que era
su primer viaje a la localidad de Chamonix y el lugar era sin duda magnifico,
unos años antes habían estado en Francia en especifico Paris, la ciudad del
amor junto a sus demás miembros de en ese entonces, como extrañaban a Yunho y
Changmin, siempre sus recuerdos volaban a sus aventuras sobre sus viajes a los
distintos países que conocieron pero ahora eran ellos tres mientras los otros
dos se encontraban al otro lado del mundo o quizás ya de regreso a corea.
Volviendo a nuestra pareja, el YooSu no dejaba de admirar el paisaje y lo bien
que contrastaba de fondo con su querido
delfín, el cual lo miraba con dulzura.
-Yoochun te amo –
le dijo el ahora pelinegro
- y yo a ti,
Junsu-ah – respondió con una suave sonrisa y dando un sorbo a su chocolate
mientras su mente vagaba sobre la montaña y Junsu, su lindo novio tirado sobre
la nieve desnudo invitándole a unirse y hacer el amor en medio de la montaña
-pero
últimamente se te olvida decírmelo
Junsu saca al
también pelinegro de sus calientes pensamientos, lo que hace que cruce las
piernas para que esa semi-erección se baje y pueda seguir el hilo de la conversación
-Junsu ¿has
visto donde nos encontramos? Además de
que no hemos estado un minuto en privado sin que alguien nos interrumpa – le
responde con seriedad y mirando a ambos lados señalándole con la mirada las
mesas a su alrededor donde estaba parte del staff y al fondo Jajeoong
conversando por teléfono con quien sabe que persona
-tienes razón,
pero es que te extraño Chunnie – le hace un tierno puchero y es que es verdad
extraña el calor de sus labios recorriendo su cuerpo y sus palabras de amor que
murmura a su oído cuando están en plena faena
-al igual yo… -
suspira con un dejo de melancolía porque no ha recibido ninguno de esos ricos
besos que solo su delfín le sabe proporcionar – pero después de esto vamos a
tener unos días libre para nosotros
-¿¡en
serio!?¿Podemos ir a esquiar? No mejor vayamos
a conocer todo el lugar – indeciso – quiero hacer muchas cosas contigo chunnie –
hace mas puchero porque no sabe qué lugar elegir primero para la cita con su
amadísimo ratón
-no hagas
demasiados planes Junsu porque lo que quiero yo, es tenerte en la cama de mi
habitación amándote como es debido
-¡no Yoochun! yo
quiero salir, tomar fotografías del paisaje, visitar los lugares más famosos de
este sitio – reclama con otro puchero mas y Yoochun esta que casi pierde el
control ya que muere por besar a ese Junsu pucheroso
-¿así qué
prefieres estar afuera haciendo otras cosas en lugar de los cálidos y amorosos
brazos de tu novio? – cruza los brazos ofendidos debido a la declaración del
pelinegro, es que no quiere pensar que a su novio le aburre la forma en que le
hace el amor por lo que prefiere estar fuera que dentro de su cama
-no es lo que
quise decir Yoochun – puchero – quiero que tengamos una cita, llevamos meses
sin salir y cada que me citas en tu apartamento es para hacerme el amor – le
aclara antes de que su desconfiado novio le pregunte una vez más si ya se
aburrió de su relación
-pero compréndeme
Junsu, cada que te veo mi control se
pierde y solo quiero rodearte con mis brazos y besarte, poseer tu cuerpo de
todas las formas posibles y escuchar tus gemidos clamando mi nombre – Dice sin
vergüenza alguna, siendo la verdad a Yoochun le fascina como su novio explota
en éxtasis cada que lo embiste y llena
su interior con su semilla o cuando toca, muerde, lame y hace un sinfín de
cosas en los puntos más sensibles de Junsu
-¡kyaaa! Yoochun
cochino ¿cómo puedes decir esto en un lugar público? - sus mejillas adquieren un tono carmesí y no
por el fresco viento que ha dado contra su rostro, sin duda su novio no tiene
tapujo alguno de vergüenza
-porque puedo y
quiero, no me importaría que la gente descubriera que el YooSu es real, además
es la verdad te deseo tanto que a veces tengo miedo de que pienses que solo
quiero tu cuerpo y no todo el paquete completo – le confiesa una verdad que ha
callado en los últimas semanas, después que Junsu viajara a los ángeles para la
grabación de su mv, Yoochun se peguntaba a diario que estaría haciendo su novio
-yo también te
deseo Yoochun – lo mira intensamente – pero al contrario de ti no soy un ratón
pervertido mete mano cada que puede – le dice con un tono burlón en las últimas
palabras -anda no seas malo y compláceme ¿sí? Después tendremos toda la noche
para que me ames en todas esas formas que quieras – sonríe con un brillo de
lujuria en sus ojos. Junsu tambien quiere que su novio le haga el amor tanto que casi lo haga rogar por mas
-suspira
derrotado – está bien primero cita
después cama – toma la mano de Junsu y besa sus nudillos notando como su novio
mira alrededor para ver si nadie los ha visto – te amo Junsu y espera unos
cuantos días te voy a hacer el amor tan
apasionadamente que no te podrás levantar al día siguiente
- eso suena a
promesa - lo mira divertido
-y por supuesto
que lo es – sonríe coqueto mas sin embargo le esperan unos días de mucha
tentación al tener a Junsu a su lado y no poder tocarle como a e le gustase –solo
espera y te lo demostrare
Durante los días
siguientes la pareja trato lo mas que podía las ganas de besarse aunque a veces
sus impulsos los llevaban a esconderse en el primer baño que encontraran y así poder unir sus labios, cosa que los
llevaba tocar demasiado y por supuesto calentar sus hormonas en cosa de
segundos.
A la hora de la sesión de fotos Yoochun rogaba
al cielo porque su amiguito no despertara y le hiciera quedar en ridículo, pero
con Junsu rozándose a cada momento era una tarea difícil. Más sí Jaejoong se le
une para darle celos abrazando a su Junsu y este bien dejado solo sonríe e
incluso lo toma de la mano. Para la
sesión en la montaña Junsu estaba más atrevido rozaba su mano contra el
inexistente trasero de Yoochun o se le pegaba demasiado cuando tenían que subir a la motonieve
mientras el pelinegro conducía el vehículo con extremo cuidado, si no supiera
del poco autocontrol que le quedaba a Junsu, él iba y daba un millón de dólares
por saber que le ocurría a su novio.
Solo un día mas
y podría tener a Junsu para él solito, el viaje a la montaña le había dado una
idea y Yoochun planeaba llevarla a cabo, solo que primero tendrían que terminar
el trabajo. La ultima sesión de fotos se llevaba a cabo en la localidad,
mientras los tres caminaba y observaban el lugar el sonido inigualable de la cámara captaba cada uno de sus movimientos. Se
detuvieron en una pequeña joyería, donde los diseños eran exquisitos a Yoochun
le gusto un anillo de platino que tenia incrustado un pequeño diamante. Después
visitaron un bar y al último volvieron a subir a la montaña donde el fotógrafo
les pido esquiar unos metros y terminar con una pose. Al principio fue
divertido, los tres reían por las poses ridículas que a veces hacían solo para
divertirse pero una hora más tarde sus
cuerpos pedían un descanso el cual llego cuando su trabajo se vio terminado y
todos volvieron al hotel. A partir del día siguiente tendrían dos días de
descanso y hacer lo que se les viniera en gana.
Pasaban del
medio día y Yoochun esperaba en la puerta de la habitación de Junsu a que este
saliera, Su novio llevaba más de diez minutos de retraso sino se apuraban se
les haría tarde para la reservación del restaurant al cual llevaría a su novio
para un desayuno rápido, pues Yoochun prefería entretener a su novio por la
mañana a tener que gastar preciadas horas de la noche en una cena de la cual no
comería nada tan solo por observar a Junsu y esperar con ansias la hora de
llevarlo hasta su habitación a hacerle el amor.
Después de casi
treinta minutos Junsu por fin apareció
vistiendo un pantalón de mezclilla y un suéter de cuello en pico, saco negro y
botas que hacían juego. El clima era agradable por lo que no había necesidad de
usar ropa extremadamente abrigadora. Desayunaron
o mejor dicho tomaron el almuerzo, fueron de paseo por la mayoría de locales
que habían visto el día anterior pero en esta ocasión miraban cada sitio con
detalle descubriendo y probando cosas.
Cerca de las seis de la tarde una camioneta de color negra esperaba por ambos.
Ya dentro y con el vehículo en marcha se dirigieron a una cabaña que Yoochun había
alquilado a las afueras donde arboles rodeaban la cabaña además se apreciaba la ligera capa de nieve
cubriendo la tierra junto con las
montañas de fondo, sin duda iba a ser un
momento especial para Yoochun y Junsu.
El interior de
la cabaña estaba cálido debido a la chimenea que estaba encendida y calentaba
el lugar, el sofá estaba movido y en su lugar había varios cobertores y
almohadas formando una cama, al fondo había una puerta corrediza que daba al
pequeño jardín en el cual se podía hacer una parrillada con lo demás sí es que
Yoochun quisiera pero sabemos que lo que el ratón quiere es otra cosa, una
linda cosita llamada Junsu. Al cual diviso en la entrada colgando su saco e inmediato se lanzo al ataque de su presa,
llevándolo a la cama improvisada, desnudando su cuerpo lento para apreciar la
suave y tersa piel de su amante.
Observa cómo se
sonroja y hace que Yoochun lo bese con la misma entrega que tantas veces lo han
hecho, para ambos un beso es una caricia al alma, Junsu gime suavecito cada toque aumenta el
calor de su cuerpo, la ávida lengua de su novio explora el interior de su
cavidad, se desliza por todas partes encontrando a su rival y comenzando una
batalla por el dominio del beso. Las manos de Junsu se cuelan debajo de la
camisa de Yoochun llegando a sus pezones los cuales tortura con ligeros
pellizcos que hacen a cuerpo de su amante estremecerse de placer en cambio
Yoochun ha dejado su boca y baja por el cuello de su novio besando y chupando
trocitos de piel queriéndole marcar pero sabe que si lo hace al día siguiente
obtendrá un regaño por parte de Jaejoong.
Llega a los
montecitos rosados que se irguen y toma uno con su boca, arremolina su lengua contra este y la
respiración de Junsu se hace arrítmica, Junsu lo único que puede hacer es
jadear, su novio le esta torturando de
la forma más placentera que conoce, el sentir la lengua de Yoochun sobre uno de
sus pezones es delicioso y su miembro está de acuerdo con cada inyección de
sangre que logra ponerlo más duro. Se revuelve
cuando su novio ha llegado a la ingle y le ha mordido cosa que no le
provoca rechazo sino que envía una descarga a todo su cuerpo y jura que si lo
volviera a morder terminaría con su semen manchando el perfecto rostro de
Yoochun, Nunca hubiera imaginado que una mordida le excitara.
Una perla de pre-semen
cubre la punta de su falo, necesita la caliente boca de Yoochun alrededor de su pene, Yoochun le tortura un
poco mas bajando a sus testículos, se mete primero uno y lo succiona, luego
continua con el otro dejando amabas bolas hinchadas. Junsu está que se lo lleva
el diablo quiere tocar, lamer, morder todo lo que su novio le está haciendo.
Yoochun también quiere lo mismo pero primero debe probar el cuerpo de Junsu,
han pasado varias semanas desde la última vez que intimaron y necesita marcar
todo su cuerpo. Un gemido ronco hace eco en la habitación cuando Yoochun lame
la gota de pre-semen y el falo de Junsu da un brinco debido a la atención. El pelinegro
arremolina la lengua sobre la punta, rodeando su glande y raspando sutil con
los diente las venas marcadas del pene de su novio quien gime su nombre lo que
provoca una lamida furtiva por toda su extensión.
-Chunnie~ mas….-
le pide con las manos enredadas en el cabello del pelinegro
-¿mas? – le pregunta
con una sonrisa ladina, sabe perfectamente que su novio está al límite pero un
poco de espera no hace daño
-si, chunnie…mas
– le dice con los ojos entrecerrados mientras levanta la cadera dándole a
entender a su novio lo que desea que haga con su experta boca
-mi baby quiere
darme su lechita - dice y a cambio
recibe un golpe en el hombro, levanta la vista y ve el rostro sonrojado de su
novio, Junsu en cuestiones de hablar un poco sucio es muy inocente. Se eleva hasta
quedar frente al rostro del pelinegro y le da un beso corto y profundo dándole a
probar de su propio sabor.
Se da cuenta que
aun va vestido y como un torbellino queda a la par de su novio, como dios lo
trajo al mundo, su pene casi le agradece la liberación y es que Yoochun tampoco
se queda atrás, su erección duele y necesita atención urgente. Así que en la típica
posición del sesenta y nueva, su pene queda a la disposición de Junsu el cual
ni tarde ni perezoso lo toma y comienza a hacer magia sobre el falo de Yoochun.
Yoochun por su parte toma con el dedo
medio más pre-semen de su novio y lo embarduna alrededor de su contraído anillo,
los pliegues de su entrada se abren y el dedo del pelinegro entra con facilidad.
Con su dedo entrando y saliendo los gemidos de Junsu por más le hacen saber que
va por el buen camino. Se estremece cuando la húmeda lengua de su novio ha
parado en su entrada dando cortas lamidas a su arrugado anillo y suelta un
gemido ronco, nunca en la vida Junsu había hecho esto y le gusta, mientras la
mano de su novio bombea su erección y el se mueve contra la mano de Junsu,
ahora es Yoochun quien pide más a su atrevido novio.
-basta Junsu…-
lo detiene y solo escucha el gruñido de inconformidad por parte de su amante -
baby no quiero correrme en tu mano, yo
tengo un lugar mejor - le dice a la vez
que hunde su dedo en el interior de Junsu llegando a tocar su próstata y por
ende su novio arquea la espalda debido a la descarga de placer que corre por su
cuerpo
Se coloca entre
las piernas de un Junsu jadeante y sudoroso, Yoochun toma la base de su miembro
y lo perfila en la entrada de Junsu, su glande se hace paso por el estrecho
pasaje, sin despear la vista del ángel que tiene cautivado su corazón, Yoochun
entra por completo y espera a que su novio se adapte a su pene, la sensación de
las paredes de Junsu rodeando su falo son exquisitas, que teme no poder
controlarse. Besa a su novio mientras la incomodidad en la parte trasera se va,
su beso es dulce, calado lleno de amor y pasión, saben que no importa cuánto
tiempo lleven juntos sus besos siempre tendrán ese tinte y su relación está
lleno de matices que hacen de su vida apreciar
los momentos que ambos pasan juntos.
-muévete… –
murmura Junsu sobre sus labios y su cadera empieza un embiste contra el falo de
Yoochun que esta cavado hasta la empuñadura
Tomando a Junsu
por la cintura comienza a penetrarlo lento y firme mientras su boca se hace
cargo de los labios rojos de su novio, entra y sale por completo de su entrada
y en un solo movimiento se clava dentro, Junsu se arquea mientras sus gemidos
son más agudos, el sudor corre por sus pechos y la intensidad del encuentro
aumenta, han cambiado de posición y
ahora Junsu se sostiene de sus piernas y
brazos en la posición a cuatro, Yoochun
masajea sus glúteos para después soltar
un par de azotes contra las firmes nalgas de su novio, su pene se clava tanto
como puede llegando a tocar su próstata. Junsu acaricia su propio miembro, los
azotes que le da Yoochun lo ponen más duro. Saben que no van a durar mucho más cuando las embestidas de
Yoochun son más rápidas y la mano de Junsu se mueve frenéticamente contra su
miembro, Yoochun se inclina dejando besos sobre el hombro derecho de su novio
mientras arremete contra su entrada.
-Chunnie… me voy
a ~ - no terminar de hablar por que Yoochun lo interrumpe mordiendo su hombro
causando una explosión de éxtasis y sucumbe ante su orgasmo, el primer hilo de
semen cae contra los cobertores Y Yoochun le muerde un tanto más fuerte que
termina de vaciar a su novio. Toda su semilla esta esparcida sobre su improvisada
cama.
-te amo Junsu-ah
– le dice a oído y lo embiste unas
cuantas veces hasta que todo su cuerpo
se tensa llegando al orgasmo con un profundo y ronco gemido con el nombre de
Junsu en sus labios. Su semen llena el interior de su novio y espera a que su
pene baje de tamaño para salir del estrecho espacio.
Jala a Junsu con
el recostándose en su nido de amor, evitando que junsu se manche con su propio
semen. Ambos regalándose cortos besos mientras sus sonrisas hablan por sí
mismo, saben que están satisfechos por la actividad.
-Yoochun, me
mordiste…
-y te gusto,
Junsu – le sonríe – me di cuenta de eso – sonríe amplio cuando las mejillas de
su novio adquieren un tono rosado por la vergüenza, es que Junsu no era consciente de que le excitaran ser
mordido por su chunnie
-ya no me
muerdas ¿si? – le pide aun con las
mejillas sonrojadas y trata de convencer a su novio con pucheritos y uno que
otro beso
-no, ahora sé
que te gusta no dejare pasar la
oportunidad – responde con alegría en su voz y muerde suave el hueso de la clavícula de Junsu ganándose un ligero gemido
por parte de su novio, sonríe complacido al escuchar tan melodioso sonido que
escapa de los labios de Junsu – lo ves, te encanta, baby
La vergüenza se
expande por todo el rostro de Junsu que parece semáforo, esconde el rostro
contra el pecho de Yoochun para que este no le vea, en un movimiento Yoochun
cubre sus cuerpos y atrae más a su novio
para sentí la calidez de su cuerpo, poco a poco el sueño le vas
venciendo y Yoochun se queda con el pensamiento de que quizás durante la
madrugada podría conseguir un poco de acción con su nuevo descubrimiento.
Con los arboles
guiando su camino el trió se dirigía al aeropuerto de suiza, puesto que era la
forma más fácil de llegar a la localidad, dentro del vehículo, Junsu cubría su
cabeza con la gorra de su sudadera y miraba a las afueras despidiéndose del
lugar y recordando todo lo que se divirtió
en allí. En el centro Jaejoong con los brazos cruzados miraba a Yoochun, es que
el mayor de los tres había descubierto las marcas moradas en el cuerpo de Junsu y le había preguntado
al menor, pero como este se negaba a hablar su instinto le dijo que había un
rato detrás de todo, así que llamo al pelinegro y le hizo que le contara el
porqué de las marcas en el menor de los tres. Yoochun sin pudor alguno le
relato que a Junsu le gustaba ser mordido y el cumpliría los deseos de su
novio, decir que tanto castaño como pelinegro estaban como farolillos fue
poco, ambos le dieron un golpe en los
brazos a Yoochun por su falta de vergüenza y pudor. Y he ahí del porque
Jaejoong va en medio de los amantes, cuando regresen a corea les dará una buena
platica de pudor al sinvergüenza de su amigo poniendo como ejemplo a su hermano, ya que sabe que Yoochun es como una
mama gallina, sobreprotector con
Yoohwan. Y preguntarle que si le gustaría
ver a su hermano de la misma manera que Junsu con todas esas mordidas por su
cuerpo, con tal solo imaginarse la reacción del pelinegro tendrá suficiente
para que Yoochun deje de marcar a Junsu como ganado. Que ya sabemos que es de
él, pero no hay que ser tan excesivos con las marcas. Por su parte Junsu solo
espera regresar a casa y disfrutar de los pocos días de descanso antes del lanzamiento
de su segundo álbum. Y en uno de esos días, llamar a su novio para ver una película
o simplemente para hacer el amor.
Fin
ay por dios! ese junsu que bien que le encanta que yoochun se lo rapte y le haga cositas ricas xD y es comprobado por el raton despues de todo lo que le hizo xD me encantan los fic asi lindos pornosos aligeran toda mi vida (?) xD es q amo verlos imaginarmelos asi *0*
ResponderEliminargracias por la actuuuu! <3